El bisonte europeo (Bison bonasus), una de las especies más emblemáticas de Europa y que está presente en Ciudad Real tras su expansión gracias a iniciativas privadas, vuelve a estar en el centro de la discusión tras el reciente hallazgo de restos de ADN en la Cueva del Mirón, en Cantabria, que corresponden al Pleistoceno tardío.
Fernando Morán Castillo, director del Centro de Conservación del Bisonte Europeo en España y miembro del Grupo de especialistas en Bisonte Europeo de la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN), analiza a través de un comunicado las implicaciones de este descubrimiento.
Según Morán, este hallazgo pone en entredicho afirmaciones categóricas pasadas sobre la ausencia del bisonte europeo en la Península Ibérica. «No es que nunca haya habitado España, es que no se había buscado ni encontrado antes«, manifiesta.
En su opinión este descubrimiento, realizado por un equipo de arqueólogos casi por casualidad, podría abrir nuevas líneas de investigación y fomentar una mayor prudencia en los estudios científicos.